Olave fue la marca que posicionó el aceite de oliva chileno en el mundo. Pionero en nueva olivicultura y con reconocimientos de gran importancia desde sus inicios.
Un producto con fuerte orientación a la calidad y respeto por la naturaleza.
La integridad y calidad del aceite es lo que marca la diferencia entre unos y otros. El aceite que un consumidor compra y consume hoy debe ser igual al que se consumió hace años atrás, o igual al que consumirán en años adelante. Ofrece siempre el mismo perfil sensorial. Para esto es que existen los Master Blenders, un equipo altamente calificado de expertos en aceite, llamados Oleólogos.